En las décadas de los 80´ y 90´ varios países emergentes experimentaron con procesos de liberalización financiera. A los residentes del país se les permitió adquirir activos y pasivos denominados en moneda extranjera y a los no residentes se les permitió operar en los mercados financieros domésticos (incluida la posibilidad de ingreso de bancos extranjeros). El objetivo era mejorar la eficiencia y competitividad de los sistemas financieros de estos países, de manera de reducir los costos y aumentar el acceso al crédito. Sin embargo, la evidencia sobre el impacto que ha tenido la apertura financiera en el acceso al crédito de las empresas locales es contradictoria. La literatura más antigua encuentra efectos positivos de los procesos de liberalización financiera sobre el acceso al financiamiento de las empresas locales (Dell’Ariccia y Marquez [2004]). La literatura más reciente, utilizando modelos de selección adversa, demuestra que la apertura financiera puede empeorar el acceso al crédito de las firmas más pequeñas de la economía (Gormley [2007], Detragiache, Gupta y Tressel [2008]).En este trabajo se propone una explicación para estos resultados aparentemente contradictorios. En particular, se argumenta que los efectos de la apertura financiera sobre el acceso al crédito dependen de la estructura competitiva de la banca doméstica anterior a la apertura.El modelo utilizado en este trabajo es de riesgo moral con agentes heterogéneos en capital. Se estudian los efectos de un proceso de liberalización financiera sobre el acceso al crédito en una economía pequeña y relativamente escasa en capital. La liberalización consiste en la eliminación de controles a la entrada y salida de capitales, y en el ingreso de bancos extranjeros a los mercados financieros locales. Se muestra que los efectos de la liberalización sobre el acceso al crédito dependen de la estructura competitiva de la banca doméstica previa a la liberalización. Cuando la banca doméstica es perfectamente competitiva, la apertura financiera produce una entrada neta de capitales, aumentando el número de empresarios que consiguen financiamiento. En el caso opuesto de un banco que opera como monopolio antes de la liberalización, los efectos de la liberalización podrían revertirse, llegando a excluir del acceso al crédito a las empresas incumbentes menos capitalizadas de la economía. Esto ocurre porque la apertura financiera aumenta el costo de fondos del monopolista, ya que ahora compite por los depósitos. Este aumento de costos puede generar un deterioro en las condiciones de crédito ofrecidas a las firmas domésticas. Esto no ocurre si la banca doméstica es competitiva antes de la liberalización.